La sinusitis se define como la inflamación de los senos nasales. Los senos nasales son cavidades dentro de los huesos de la cara alrededor de los ojos y detrás de la nariz. Esta inflamación se debe usualmente a infecciones tanto bacterianas como virales.

Una de las condiciones que con más frecuencia produce sinusitis recurrente son las alergias, se ven en un 50% de las personas que están afectadas por sinusitis. Además de los estornudos y la picazón de la rinitis alérgica, lleva también a inflamación de la mucosa de la nariz y de los senos nasales.

Porque los senos nasales drenan por pequeños agujeros que van a la mucosa de la nariz y que son del tamaño de la punta de un lápiz, cualquier inflamación va a producir un bloqueo en el drenaje normal de los senos nasales.

Su alergista le puede ayudar a manejar su sinusitis. Los tres signos que usualmente indican sinusitis son:

1. Una gripe que dure más de siete días y se acompañe de tos, fiebre, dolor de cabeza, dolor en los dientes, dolor en la cara, o presencia de drenaje nasal de color ver o gris.

2. Se ha perdido el sentido del olfato, el sabor y también hay halitosis o mal aliento.

3. En los niños hay aumento de la irritabilidad y vómitos que ocurren cuando el niño está con una tos prolongada.

Además de prescribir un antibiótico cuando la sinusitis es causada por infección bacteriana, su alergista puede prescribir medicamentos para disminuir el bloqueo de los senos nasales y/o el control de las alergias.

Para personas con alergias el tratamiento va a consistir en uno que controle y disminuya los síntomas de alergias para así poder prevenir el desarrollo de las sinusitis. Este tratamiento puede incluir la inmunoterapia (vacunas de alergias sublinguales), la cual hace al paciente menos alérgico con el tiempo, medicamentos antiinflamatorios como los corticosteroides en spray, los antihistamínicos con o sin descongestionantes, y el control del medio ambiente para reducir así la exposición a las causas que pueden desencadenar una alergia.