Si su asma no está controlada:

• No podrá respirar bien.

• Tendrá síntomas con más frecuencia que se intensificarán durante la noche, interrumpiendo el sueño.

• Si no puede respirar bien, sus actividades normales estarán limitadas por lo que podría faltar a la escuela o al trabajo. • No podrá hacer ejercicio.

• Tendrá que usar su inhalador de alivio con más frecuencia.

• Deberá ir al servicio de urgencias o al médico porque ha tenido un ataque de asma.

• Si su asma no está bajo control, usted podría estar en riesgo de muerte.

Y si su asma no está controlada necesita visitar a su médico para que vuelva a disfrutar de una vida “normal”.

Reproducido de la revista “Respirando con AANMA”, volumen 10.