El mejor tratamiento para el asma depende de la frecuencia con la que se presentan sus síntomas. Los médicos recetan típicamente corticoides inhalados porque son considerados como el medicamento más eficaz y seguro para controlar el asma.

Mito
Los corticoides inhalados engordan.

Verdad
Solo el uso prolongado de corticoides orales se asocia al aumento de peso, pero se recetan para tratar episodios agudos de asma o cuando los tratamientos convencionales no funcionan.

Mito
Cuando un paciente comienza a utilizar los corticoides inhalados, los medicamentos terminarán perdiendo eficacia. Por lo tanto, con el tiempo tendrá que tomar cada vez más para controlar los síntomas del asma.

Verdad
Si una persona necesita aumentar la frecuencia de administración de un medicamento, quiere decir que su asma está empeorando, no que el medicamento es menos eficaz. El objetivo de controlar el asma es lograr un control óptimo de sus síntomas con la dosis mínima efectiva.

Mito
El tratamiento por inhalación debería emplearse como último recurso, reservado para los casos crónicos o graves.

Verdad
Según estudios, los corticoides inhalados constituyen el medicamento más seguro y eficaz que existe para el tratamiento del asma crónico leve o moderado.

Mito
Los corticoides inhalados son adictivos.

Verdad
Los corticoides inhalados impiden que la enfermedad avance y la controlan sin efectos secundarios relevantes. Sin ellos, lo más probable es que empeore y se necesiten más medicamentos en el futuro.