La semana pasada respondimos una pregunta de una amiga lectora, sobre que es un alérgeno oculto. Esta semana ampliaremos la información sobre este tema, en relación a las regulaciones vigentes en el etiquetado de productos y las medidas preventivas de exposición.

Como regla general, el etiquetado de una sustancia se hace según una de estas tres categorías:

– “Contiene” (el alérgeno): cuando dicha sustancia se usa como parte esencial de la receta.

– “Puede contener trazas de” (el alérgeno): puede estar contaminado o presentar pequeñas cantidades de una sustancia que no forma parte de la receta del producto. Usualmente se utiliza cuando en una fábrica que se manufacturan productos de diverso origen y puede existir contaminación.

– “Libre de” (el alérgeno): se utiliza para garantizar la ausencia del alérgeno en un producto que tiene relación con él (Por ejemplo, el trigo o gluten en productos de repostería).

Es importante puntualizar que no todos los niños alérgicos a un alimento van a tener reacciones con cantidades mínimas del alimento. No a todos los niños hay que recomendarles las medidas más estrictas de evitación de alimentos.

El especialista en Alergología es quien debe saber seleccionar aquellos niños que necesitan unas recomendaciones más estrictas que a continuación se van a explicar.

Medidas preventivas de exposición
Al comer fuera de casa, debe siempre preguntarse sobre la composición de los platos, y alertar para evitar contaminación cruzada durante la  preparación de alimentos.

Los individuos con reacciones severas a alimentos deberían evitar los alimentos procesados, o comprar aquellos de marcas de confianza, y llevar siempre consigo una alerta y adrenalina autoinyectable.

Los padres y los niños deben ser educados en la lectura de etiquetas.  

Los pacientes con alergia grave deben portar adrenalina autoinyectable. Aquellos con reacciones leves se beneficiarían de portar antihistamínicos y corticoides.